Elegir frutas de verano como un experto

Con el cambio de estación se renueva la oferta local de frutas: melones, sandías, duraznos, pelones, ciruelas, uvas, entre otras, nos indican que el verano está aquí.

Saber cómo elegirlos es clave para beneficiarnos con frutas en su adecuado punto de maduración, con el mejor color, sabor, olor y aroma y, por lo tanto, con el mejor valor nutricional, así como para tener en cuenta su conservación, duración y reducir el desperdicio al mínimo posible.

A continuación, te dejo una guía para elegir las frutas de verano. Espero te sea de inspiración para la compra y luego puedas disfrutarlas en buena compañía.

Melones

La fruta debe estar sana y sin machucones. La táctica de dar golpecitos para ver si el melón está maduro no es la más eficiente. Los expertos recomiendan elegir los melones por su olor perfumado, que no tengan olores extraños y si no tienen olor alguno, probablemente estén inmaduros. Además, es bueno observar el color de la fruta, el fondo debe tener un tono amarillento.

Otra opción es presionar ligeramente los extremos del melón, si la piel cede sin dejar huella, el melón estará maduro, si cede con poca presión, es porque está demasiado maduro. Este truco puede ser engañoso si alguien ya lo realizó anteriormente y uno presiona en el mismo punto, puede haber quedado blando sin que necesariamente esté maduro.

Observar las arrugas de la piel del melón puede darnos pistas de su dulzor. Cuanto mayor estrés hídrico haya sufrido la fruta, mayor cantidad de arrugas en la piel tendrá y más dulce será al estar maduro.

Conviene conservarlo en un recipiente cerrado en la heladera, de esta forma durará aproximadamente 5 días. Es importante no dejarlo en bolsas cerradas de nylon ni en contacto con otras frutas, ya que es sensible al etileno.

Sandía

Como sucede con el melón, la estrategia de dar palmaditas en la piel de la fruta para saber si la pulpa vibra en su interior, o si suena hueco y está madura, requiere mucha experiencia y no es fácil.

Podemos buscar sandías que estén libres de zonas blancas, manchas o heridas.

Cuando la sandía está entera, se conserva muy bien por hasta una semana a temperatura ambiente. Cuando es cortada, se recomienda conservar refrigerada de 2 a 3 días con un nylon que cubra la pulpa expuesta.

Duraznos

Al elegir duraznos hay que fijarse que estos no tengan golpes, machucones ni heridas en la piel. Lo mejor es elegirlos firmes, que estén un poco inmaduros y dejarlos madurar (cuando esto ocurre, el color de fondo que aparece debajo de las coloraciones rojas pasa de verdoso a amarillo, indicando que está listo para consumir).

Los duraznos maduros deben conservarse en la heladera por un período corto de tiempo (no más de un día). Si los duraznos están inmaduros, pueden conservarse a temperatura ambiente para favorecer su maduración (aunque solo por unos pocos días).

Pelones

Son frutas muy similares a los duraznos, solo que su piel es lisa y brillante.

Si los pelones están maduros deben conservarse refrigerados, si están inmaduros deben conservarse a temperatura ambiente. Lo mejor es comprarlos inmaduros y manejar el estado de madurez de la fruta.

En un recipiente cerrado en la heladera pueden durar de 5 a 7 días.

Ciruelas

Buenas ciruelas son las firmes al tacto, que no tengan golpes ni estén machucadas. Maduran rápido por lo que, si no se consumen inmediatamente, pueden guardarse de 5 a 7 días en la parte menos fría de la heladera, en bolsas de nylon.

Uvas

Al elegir racimos de uvas, hay que fijarse que la parte verde que conecta las uvas entre sí (el raquis), se encuentre verde. Las uvas deben estar sanas y no desprenderse fácilmente. Las que son rojas, no deben tener ninguna parte verde.

Siempre sirve ser buen observador, si estamos en la feria o mercado al aire libre, prestemos atención si algún insecto vuela sobre los racimos de uvas, siempre querremos comprar las uvas que sobrevuelan las abejas y no las que sobrevuelan las moscas.

Las uvas se conservan bien refrigeradas en bolsa de nylon.        

Lic. Nutrición Elizabeth Barcia