Tres estrategias para evitar el desperdicio de alimentos

Reducir el desperdicio de alimentos en nuestros mercados, ferias y tiendas de alimentos es importante para hacer que nuestra alimentación sea más sostenible. De esta manera no solo estamos cuidando nuestro planeta, sino también asegurando que los recursos sean aprovechados de manera eficiente. En este artículo, te comparto tres estrategias innovadoras que pueden marcar la diferencia en la lucha contra el desperdicio alimentario, ayudándonos a todos a ser consumidores más responsables y conscientes.

1) Comprá “comida fea”

No descartes frutas y verduras por su apariencia, podés comprar frutas y verduras que no cumplen con los estándares estéticos convencionales, que tengan formas extrañas, alguna mancha, golpe, o sean de menor tamaño, pero de todas formas son comestibles y nutritivas. Sumate a esta tendencia ecológica y elegí frutas y verduras que no se ven tan atractivas, pero son perfectamente aptas para su consumo.

2) Utilizá apps contra el desperdicio de alimentos en tu región

Hay varias aplicaciones móviles que ayudan a combatir el desperdicio de alimentos, conectando a usuarios con locales cercanos que tienen excedentes de alimentos a precios reducidos. Un ejemplo es la app Buen provecho, que conecta negocios que tienen excedentes de comida con personas que buscan comprarla a precios reducidos, evitando así el desperdicio. La utilización de este tipo de aplicaciones genera beneficios tanto a nivel ambiental como económico y social.

3) Sumate al impacto de ONG’s contra el desperdicio de alimentos

Existen organizaciones sin fines de lucro que trabajan para reducir el desperdicio de alimentos que tienen programas de voluntariado y donaciones para contribuir a la causa. Un ejemplo de esto es Redalco (Red de alimentos compartidos), que recupera frutas y verduras que serían desperdiciadas en la Unidad Agroalimentaria de Montevideo (UAM) y en chacras, y las entrega a organizaciones sociales que brindan platos de comida a quienes más lo necesitan, como Caif, club de niños, escuelas, liceos, centros juveniles, merenderos, comedores, refugios y ollas populares. El voluntariado de empresas y personas es clave para el accionar de esta ONG y garantizar el acceso de miles de personas a un alimento nutritivo y para acabar con el desperdicio de alimentos. Periódicamente se organizan jornadas de voluntariado para clasificar y encajonar frutas y verduras que luego son entregadas a los beneficiarios. Esto genera compromiso social y ambiental, además de una experiencia divertida. Podés enterarte de más y unirte a la misión a través de su sitio web redalco.org.

¿Conocías estas estrategias? ¡Ponelas en práctica y sumate al camino de un consumo más sostenible y saludable!

Lic. en Nutrición Elizabeth Barcia