En épocas en donde todos estamos cuidando más que nunca este recurso tan necesario para el funcionamiento de la sociedad, les contamos qué es la huella de agua. Es un indicador que mide el volumen total de agua dulce que se utiliza para producir bienes y servicios.
El ciclo del agua es el proceso natural por el cual el agua se mueve constantemente a través de la Tierra en diferentes formas: evaporación desde cuerpos de agua, transpiración de las plantas, condensación en la atmósfera, precipitación en forma de lluvia o nieve, infiltración en el suelo y flujo de agua subterránea, entre otros. Este ciclo es fundamental para mantener el suministro de agua dulce en el planeta y es crucial para la vida en la Tierra.
La huella hídrica se mide en términos del volumen de agua consumida, evaporada y contaminada. Se divide en 3 categorías:
- Huella hídrica azul: la cantidad de agua superficial y subterránea requerida (evaporada o utilizada directamente) para producir un artículo.
- Huella hídrica verde: la cantidad de agua de lluvia necesaria (evaporada o utilizada directamente) para fabricar un artículo.
- Huella hídrica gris: la cantidad de agua dulce requerida para diluir las aguas residuales generadas en la fabricación, a fin de mantener la calidad del agua, según lo determinen los estándares normativos.
En general cuando compramos un producto no pensamos en la cantidad de agua que se utilizó para producirlo. El agua virtual es el agua “escondida” en los productos y servicios que compramos y usamos todos los días. El agua virtual muchas veces pasa desapercibida para el consumidor final, pero esa agua se ha consumido a lo largo de la cadena de valor.
En el caso de la ropa, por ejemplo, los vaqueros de jean utilizan miles de litros de agua en su producción. A medida que el vaquero es más claro, más cantidad de agua se utiliza, y más residuos de productos químicos se generan. Además, el efecto desgastado hace que la prenda dure menos tiempo, lo que implica que los recursos que se usaron en su fabricación no se aprovechan al máximo. Al momento de comprar esta prenda, elige colores oscuros y sin desgastar, y estarás eligiendo un producto que ahorró cientos de litros de agua en su fabricación.
En la imagen se ilustran diversos productos de la vida cotidiana y su huella de agua. Sorprende ver que para tomar una taza de café en la mañana, se usaron 140 litros de agua. Una camiseta de algodón utilizó 2.700 litros de agua en su producción, por lo que extender al máximo la vida útil de esta prenda usándola muchas veces, contribuye a hacer un uso más sustentable de la misma. Se ilustran además algunos alimentos, carnes y quesos tiene gran huella hídrica, y en el en el siguiente link pueden encontrar la huella hídrica de mayor variedad: Link
La gestión adecuada del ciclo del agua es esencial para garantizar un uso sostenible del recurso hídrico y reducir la huella hídrica de los productos. Esto implica tomar medidas para conservar el agua, promover la eficiencia hídrica en la producción y minimizar el desperdicio de agua en todas las etapas del ciclo de vida de un producto. Toda esta información nos ayuda a tener una idea más consciente de los productos que consumimos y nos permite tomar decisiones informadas al momento de comprar.
Bioq. Inés Tiscornia
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